ACEITE DE COCO
El aceite de coco se elabora a partir de cocos frescos pelados y molidos. El coco rallado seco se prensa entonces en frío para obtener aceite.
Tiene diferentes usos tanto en cocina como en belleza.
APLICACIONES EN COCINA:
Es una grasa saludable que se solidifica con temperaturas bajas y se vuelve líquido con el calor, por encima de los 25 grados de manera aproximada. Esta característica nos permite jugar con las texturas para solidificar algunas recetas sin tener que usar gelatinas o natas.
Tiene un aroma suave, dulce y tropical que combina bien con cualquier tipo de comida.
El aceite de coco al igual que el aceite de oliva, tiene la gran ventaja de que no se oxida ni se vuelve tóxico cuando lo cocinamos a altas temperaturas. Este aceite puede ser la alternativa más saludable para freír ya que, además de no adulterarse y mantener sus propiedades, el alimento también absorberá menos grasa.
APLICACIONES EN BELLEZA:
Es un aceite rico en ácido láurico, muy nutritivo, particularmente idóneo para la piel y el cabello seco.
El aceite de coco previene la deshidratación cutánea y protege las fibras del cabello, dando al pelo volumen y brillo.
Se trata de un auténtico aceite de belleza, de calidad excepcional, que se funde al contacto con la piel y que posee un olor agradable.
¿Cómo lo podemos utilizar?
- Aceite nutritivo corporal: Aplicar una pequeña cantidad de aceite en las zonas secas.
- Tratamiento del cabello: Aplicar una pequeña cantidad de aceite en las puntas secas, dejar actuar unos minutos y aclarar con agua tibia.
- Aceite desmaquillante: tomar una pequeña cantidad de aceite y masajear el rostro; retirar el exceso con un algodón.